La mentalidad de un activista digital: 3 sistemas para lograr maximizar la acción climática

La mentalidad de un activista digital: 3 sistemas para lograr maximizar la acción climática
Photo by Clem Onojeghuo / Unsplash

Lidiar con la eco-ansiedad es difícil para muchas personas.

Esto es particularmente cierto a la luz de los incendios forestales actuales en Chile.

Si bien algunas personas optan por desconectarse para olvidarse de la angustia climática, solo unas pocas logran convertir su angustia en acción o encontrar una comunidad de ideas afines con la que participar.

Sin embargo, el mundo digital ofrece oportunidades únicas para que los ciudadanos y activistas amplíen aún más su acción climática.

Aquí hay tres sistemas que los activistas digitales han adoptado para maximizar su acción climática:

🧠 Sistema #1: Cognición Extendida

Los activistas digitales ven las computadoras no solo como herramientas para mejorar su productividad.

Ven sus notebooks como una extensión de su mente que los conecta con el resto de los cerebros de la civilización humana, tanto del pasado como del presente, a través de internet. Además, con el poder de la inteligencia artificial, los activistas pueden hacer el mismo trabajo en menos tiempo, lo que permite llevar al siguiente nivel sus tareas de voluntariado, a veces teniendo dos o tres trabajos en el tiempo de uno solo.  

Algunos activistas incluso se han construido un “segundo cerebro” utilizando la tecnología.

📣 Sistema #2: Amplificar el mensaje

Expresar la ansiedad ecológica es crucial para la lucha contra el cambio climático.

La mayoría del planeta no entiende qué es lo que está pasando con el planeta tierra, aunque lo intuyen. Los activistas digitales envían mensajes a través de múltiples canales escribiendo un artículo un solo clic. Ser consistente en las publicaciones conduce a un impacto acumulativo.

Cambiaremos el clima si logramos cambiar la mentalidad de la gente.

👩‍💻️ Sistema # 3. Comunidades en línea

Combinar acción local con global es un gran combo.

Y esto es posible gracias a internet. Nuestro navegador nos proporciona una plataforma descentralizada para colaborar internacionalmente y construyan comunidades en torno a causas climáticas compartidas. Además, el presente y futuro de la educación en línea son las comunidades y los cursos por cohortes.

Tecnologías como las organizaciones autónomas descentralizadas (DAOs, por sus siglas en inglés) son ejemplos de formas en que los activistas digitales están aprovechando la tecnología para crear un impacto a gran escala.

Todavía hay mucho que decir sobre el trabajo climático en el espacio digital, tal como por ejemplo la toma de decisiones basada en datos, el modelado climático y la visualización de datos.

Pero por ahora, la nota positiva es que el poder de la tecnología nos ofrece múltiples posibilidades para reconvertir la eco-ansiedad en acción climática.